-¿Vas camino de Lisboa, río abajoo has podido guarecerte de la lluvia?
-Voy camino de Lisboa, rumbo al Fado,
a la vida reposada, las antípodas del Turia.
-¡No te marches, muchachilla, no te marches!
-Me marcho porque aquí hay polvo, polvaredas y chirríos,
porque aquí no escucho el agua, más que en días especiales,
como hoy.
-Quédate, muchachilla, invocaremos juntos el agua,
y, si ella no viene, aguardaremos hasta el rocío.
-Pero no. Cada pueblo tiene la lluvia que merece.
La de aquí tiene rabia contenida, ganas de fastidiar.
En Lisboa el agua te rodea y te rodean sus peces.
-Está bien, muchachilla, voy contigo.
No sé si tienes razón; al menos me has convencido.
-Te espero en Toledo, agarrada al gran meandro.
¡Me dejé arrastrar por el agua y salí del H&M
casi sin consciencia, Atocha abajo, hasta el Manzanares,
el Jarama, Aranjuez, bonita tierra... adiós a todos!
-Tras tu estela me zambullo, tras tu espuma aún reciente,
de burbujas redondas de plata. ¡Espérame, no lo olvides!
Y el agua se pone fría
ResponderEliminarpara que nadie la toque.
Espero que nadie se viera arrastrado ayer por la lluvia involuntariamente. Veo que tú llegaste a casa sana y salva. :)
ResponderEliminarY los versos de Lorca conmigo.
ResponderEliminar¿Qué tal si vamos a ver salir el agua de la Fuente del Agua Fría este domingo? A un pasito del Cerrón. :)
ResponderEliminarPor mí, estupendísimo. La Pobre Sierra Norte debe echarnos de menos, yo la he traicionado por una parienta más pequeña, rosacea y pedrigueña... ¡Mmmmmmmhhhh! Espero que no sea rencorosa y me parta un tobillo.
ResponderEliminarLa Sierra Norte es siempre acogedora. Y creo que el tiempo nos va a acompañar: será bueno para el paseo pero malo para la sed y los campos.
ResponderEliminarSierra norte viejita y redondeada,
ResponderEliminarno me mires mal si te traicioné
por tu joven y robusta hermana.
Las piedras y los riscos de la Pedriza,
sus vericuetos y dramáticos barrancos
a veces me cautivan,
Y me olvido de tu serenidad, tus amplitudes, tus soledades rústicas, tus pueblos que aún conservan sus tejas rojas y alguna que otra boina despistada.
Has dicho viejita...
ResponderEliminarHay algo especial que me une a la Sierra Norte. ¿Sería mucho pedir que esparciérais mis cenizas junto al vértice del Cerrón en caso de indeseado fallecimiento prematuro? Siento el palizón que os encargo... :)
ResponderEliminarVale que me ignores a mí para no tener que revelarle al mundo que ha vuelto a poseerte el maligno espíritu de Yo-Plagio, pero al pobre Mecacholo... por muy cenizo que sea... ¡Esto es un atropello, caballero!
ResponderEliminarMenos mal que alguien me defiende...
ResponderEliminar:)
Mecacholo, no me gusta la idea, así que haz el favor de poner los medios para que no se produzca tal eventualidad.
ResponderEliminar¡¡¡Pero mira que te gusta el Cerrón!!! ¿Es algo racional o sentimental?
Nata, permítame decirle que yo no plagio. Me limito a captar ideas y palabras al vuelo que me parecen utilizables, y las empleo aquí y allá. :)
By the way, aún no sabemos si nos vas a acompañar... ¿?
¡Cómo moló! :) ... A pesar de los imprevistos y retrasos... :(
ResponderEliminarLo mío con el Cerrón es puramente sexual, Australino. ;)
El caso es que me has metido el gusanillo en el cuerpo y creo que este fin de semana, seguramente el sábado, me anime y me suba para allá, aunque solo sea para ver de cerquita la nieve en el Pico del Lobo.
ResponderEliminarA mí también me gustó, granizo incluido. :)
¡Qué envidia! ¡Yo también quieroooo!
ResponderEliminarYo quiero participar pero con otro tema muy importante y en el cual me gustaría que participaran todos ustedes y sus conocidos.
ResponderEliminarSe trata de hacer algo en contra del secuestro, en contra de la impunidad, en contra de la violencia que se vive en Colombia hoy en día.
Entra en mi blog http://chimchombia.blogspot.com/ y participa activamente.
Entre todos podemos colaborar para que esta situación termine.
Por una Colombia Libre.
Macorisa, espero sinceramente que termine el terrorismo en Colombia. Y lo más pronto posible.
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